jueves, 3 de agosto de 2017

Carnet Social:


DEFUNCION:
Cumplimos con el penoso deber de informar el  sensible fallecimiento de los siguientes huallanquinos:
MARIO HUERTA ROJAS (Q.E.P.D.), falleció el 28 de julio en la ciudad de Lima, a consecuencia de su grave estado de salud. Sus restos fueron trasladados a su natal Huallanca, para el velorio y luego el sepelio en el Cementerio Municipal.
Nuestras condolencias a sus familiares, en especial, a su esposa,  hijos, nietos, y hermanos.

¡MARIO HUERTA, DESCANSA EN PAZ!

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ELEAZAR FLORES PICON  (Q.E.P.D.) falleció el 30 de julio en el Hospital Cayetano Heredia de Lima, víctima de una prolongada situación crítica de su salud. Sus restos fueron velados en la Parroquia de la Asociación de Vivienda San Francisco de Cayrán- San Martín de Porres. El sepelio se realizó en el Cementerio Parque del Recuerdo de Puente Piedra.
Nuestras condolencias a los familiares, en especial, a sus esposa, hijos, nietos,  y hermanos.

¡ELEAZAR FLORES, DESCANSA  EN PAZ!

Amigos coterráneos de Huallanca: 
Tengo el pesar de comunicarles que mi hermano ELEAZAR FLORES PICÓN ha partido al más allá; dejándonos en un dolor profundo y tristeza, pues es uno de nuestros familiares que vivimos en la Calle Comercio, de la cual sólo quedan recuerdos hermosos de nuestra familia que ya se extingue.
Su deceso coincidió, incluso, en los días en que en nuestra hermosa Huallanca se encontraba celebrando las corridas de toros por fiestas patrias.
Qué nostálgicos días en que durante mi infancia llegábamos a Huallanca, y ellos, nuestros hermanos mayores, se encontraban atareados en el "armado" del palco en la plaza de armas  donde se erguía el famoso obelisco o "Shayhua".
Los familiares desde distintos puntos del país y el extranjero se congregaban a ser testigos de las corridas de toros costumbrista. Degustamos los ricos helados de leche, pan de maíz, biscochuelos y café; los visitantes traían dulces y chocolates finísimos.
Todos los caballeros con terno y corbata, las damas ataviadas de lujosos trajes; nosotros los pequeños con nuestra ropa nueva comprada para la ocasión. La verdad es con qué ánsias esperábamos esa fecha.
El tiempo pasa inexorablemente, los recuerdos nos alegran y entristecen; pero es el andar de la vida, qué le podemos hacer.

Edmundo Picón LLanos